Con la pandemia provocando una serie de preocupaciones de seguridad y desafíos económicos, casi las tres cuartas partes de los estadounidenses decidieron no tomar vacaciones este verano. Eso es según un nuevo estudio de Pingüino de valorque muestra la marcada diferencia entre las vacaciones de verano 2020 y las de años anteriores.
Para muchos estadounidenses, las vacaciones de verano son un ritual anual que brinda la oportunidad de escaparse, relajarse y descansar. Este año es bastante diferente…
Cómo cambiaron las vacaciones de verano este año
Más de la mitad de los encuestados, el 52 %, realizó menos viajes, mientras que el 36 % dijo que gastó menos dinero de lo habitual en viajes. Las pautas de distanciamiento social limitaron la cantidad de personas que podían asistir a los eventos. Esto explica el hecho de que el 21% de los encuestados asistieron a menos eventos especiales, como bodas y graduaciones.
Sin embargo, algunos tipos de vacaciones se volvieron más populares en la era de COVID-19.
Casi un tercio de los consumidores, el 31%, decidió tomar unas vacaciones de verano. Las vacaciones en casa fueron particularmente populares entre los padres, ya que el 49% de los padres con hijos menores de 18 años tomaron una este año. Además, el 6% de los encuestados realizó más escapadas de fin de semana cortas de lo habitual.
Algunas personas ya han cancelado el 2020 y están mirando hacia el 2021. Casi un tercio, el 32%, dijo que está planeando unas grandes vacaciones el próximo verano.